La Calavera Zambona

Por: Abraham Chinchillas Terrazas

Es ha vuelto ya una tradición, que en éste espacio semanal de promoción filatélica dediquemos la primera columna del mes de noviembre a reseñar los sellos postales que a lo largo de la historia de la filatelia mexicana han destacado y difundido nuestro emblemático "Día de Muertos". En cada uno de los últimos tres años, tanto el Secretario del Club Hidalgo Filatélico, Ernesto Montaño Martínez, como un servidor, hemos hablado tanto de las estampillas de "Muertos" que recientemente Correos de México emite cada noviembre, así como las que en años más lejanos ha reproducido calaveritas o han conmemorado la vida y obra de su principal creador: José Guadalupe Posada.

En esta ocasión hablaremos de la  última estampilla denominada "Tradiciones Mexicanas, Día de Muertos", emitida el pasado 22 de octubre del 2013. Éste sello es en realidad una holla souvenir, imperforada de sencilla elegancia pero de una gran belleza. El diseño de la estampillas postal reproduce el grabado de José Guadalupe Posada denominado "La Calavera Zambona", en la cual se observa una fiesta de muertos en el panteón; entre las tumbas aparecen un par de calaveras catrinas (una dama y un caballero), otras más campesinas, una de ellas sirve en un vaso el pulque de una jarra, otras sentadas al pie de la tumba central rodean los alimentos que contiene una cazuela grande, un plato, una canasta y un cántaro, al fondo se adivina el cempasúchil y la bruma del incienso. En la parte superior aparece el nombre de la emisión: "Tradiciones mexicanas / Día de muertos"; del lado derecho el nombre del grabado y su autor; del lado izquierdo, el valor facial, la leyenda "Correos de México", el nombre del diseñador, el pie de imprenta y el año 2013.

El diseño corrió a cargo de Sergio Barranca Rábago usando la técnica fotográfica para reproducir el grabado y componiendo digitalmente; para su impresión se usaron tintas naranja, amarillo, negro y tinta de seguridad; la impresión fue offset sobre papel couché blanco mate. El tamaño del sello es de 10 por 8 centímetros, con engomado de 110 gramos a una cara. Se produjeron solamente cien mil ejemplares en los talleres de Impresión de Estampillas y Valores.

Cabe recordar que la tradición de celebrar en estas fechas a los fieles difuntos data de nuestro pasado prehispánico, incluso hay quienes sostiene que es una práctica ancestral hasta el mismo origen de la humanidad. La necesidad de recordar a nuestro seres queridos que han muerto nos ha hecho imaginar el lugar que nos espera después de morir; el cual puede ser celestial, infernal o al menos misterioso. En México se dedican los días 1 y 2 de noviembre para recordar a nuestro muertos de maneras diversas pero cargadas de una profunda tradición.

Nuestros antepasados aztecas depositaban los cuerpos en una fosa, haciendolo acompañar de alimentos diversos, sal, agua, así como objetos apreciados en vida por el difundo y un perro Xoloitzcuintle, el cual acompañaría como guía hacia el inframundo. Cada elemento colocado tenia un simbolismo profundamente religioso.

Ya en la colonia, cuando se cristianizó esta tradición, la celebración de los difuntos se trasladó a los cementerios, lugares que eran adornados con flores y visitados por parientes y amigos, llenando de gozo y lágrimas el acto de memoria que significaba. En éste sincretismo fue donde El grabador aguascalentense, José Guadalupe Posada, encontró la inspiración para sus más grandes creaciones en el grabado, como "La Catrina" y otras tantas calaveras que danzan incansables en el ideario colectivo de todos los mexicanos.

Una felicitación a Correos de México por ésta emisión gran belleza y profundo significado, que rescata y presume al mundo una de nuestras tradiciones más importantes. Sin embargo, es muy lamentable que en el año del centenario del fallecimiento del ya mencionado José Guadalupe Posada (suceso por demás importante dado el aniversario y el personaje), ésta emisión no esté directamente dedicada a su memoria y solamente se sugiera, como se lee en la exposición de motivos de la hojilla filatélica, que el centenario y la emisión apenas son una coincidencia.

Usted amigo lector, puede adquirir este emisión de Día de Muertos, en la oficina postal más cercana, su valor, repetimos, es de 15 pesos; una pieza con la no estaría nada mal para empezar su colección filatélica.

Para poder comentar o profundizar en el tema, así como realizar alguna pregunta, por favor contáctenos en hidalfil@hotmail.com o en nuestro blog: http://hidalfil.blogspot.com. Hasta la próxima semana.

Palabra de la semana

HOJILLA FILATÉLICA.- Es el documento en el que se establece el o los timbres conmemorativos con la cancelación de primer día de emisión, en la misma, se establecen los datos técnicos como tiraje, diseñador, tintas utilizadas, tipo de impresión, tamaño, perforación y tipo de papel. De igual manera, se establece la exposición de motivos y una breve reseña histórica que dio origen a la emisión (tomado del "Diccionario Filatélico y Postal Ilustrado" de José Gilberto Gómez Cabrera. Colegio de Bachilleres del Estado de Hidalgo, 2009).